GUIONES DE TEATRO DE MILA OYA

La Cola por Mila Oya




IBEX 35 VERSUS CHICHARROS




      En los últimos años se ha popularizado mucho la inversión en bolsa. Todos los que disponen de unos ahorrillos han pensado al menos alguna vez en invertir en bolsa algo de ese dinero ganado con tanto esfuerzo. Y es que ¿dónde te pueden dar algo por tu dinero en la actualidad si no es ahí? La bolsa es lo único que parece que proporciona todavía rentabilidades aceptables, incluso mucho más que suculentas, comparándola con cualquier otro medio de inversión.
       La bolsa española parece que no sabe hacer otra cosa que subir y subir. Esta tendencia al alza dura ya dos años, y cada vez con más fuerza si cabe. De vez en cuando da algún susto que otro, pero, tan pronto vuelven las aguas a su cauce, la subida desenfrenada continúa. ¿Hasta cuando continuará el ascenso de la bolsa? Esa es la pregunta que intenta responder todo el mundo.

      Si la bolsa sube ¿existe riesgo de que se pierda el dinero invertido? Sí, si se elige mal el valor o el tipo de acciones que se compran. Estas rentabilidades tan altas, sobre todo las de los dos últimos años, tienen una clara contrapartida. La inversión en bolsa conlleva un riesgo. En lugar de ganar más dinero, se puede perder una parte, incluso, si se ha actuado muy torpemente o mal aconsejado, perder todo lo que se ha invertido.
>       Para invertir en bolsa ¿todos los valores son idénticos? ¿Es indiferente el tipo de valores que se adquieran porque todos se comportan de igual manera? Pues evidentemente no. Las acciones de las empresas que cotizan en bolsa entran dentro de dos posibles tipos:

             - Las empresas grandes, con un gran valor, que suelen obtener beneficios estables y normalmente crecientes, que producen un gran volumen de operaciones diariamente. Suelen ser muy seguras, ya que es difícil que pierdan mucho valor cuando la bolsa va mal, pero a cambio, no acostumbran a experimentar subidas fulgurantes cuando ésta va subiendo. Estas empresas serían las conocidas en el mundo anglosajón por blue chips, que significa las fichas de color azul, ya que estas fichas son las de mayor valor en los casinos. En España, las empresas más importantes que cotizan en bolsa están dentro de un índice, llamado IBEX. Los blue chips españoles son las que están dentro de este índice, que es una especie de club muy exclusivo, solo para las más grandes, ya que solo se admite en él a 35 empresas.

             - Las empresas pequeñas, de escaso valor relativo, que obtienen beneficios irregulares, muchas de ellas con pérdidas habituales, incluso algunas llegando a estar a punto de quebrar, empresas de las que no suele haber mucho volumen de oferta y demanda de acciones todos los días. Suelen ser valores que tienen ciclos, a veces alcanzan un valor alto, y cuando varía su ciclo y consiguen menos beneficios, cae su valor en gran proporción. La gente de la bolsa dice que tienen gran volatilidad, lo que significa que la variación de valor que pueden sufrir en un período de tiempo determinado puede ser muy grande. Cuando la bolsa sube, estos valores son los que más suben, pero cuando bajan, el desplome de su valor es tremendo. Cuando se vienen abajo, suele ocurrir también una segunda maldición: nadie quiere las acciones que se ponen a la venta, con lo que los que poseen acciones de la empresa que ha caido en desgracia, se encuentran atrapados en el desplome, viendo como todo su dinero se evapora. Los habituales de la inversión en bolsa suelen llamar a estas empresas y a sus acciones: los chicharros.

       Los inversionistas a largo plazo, que son las personas que invierten su dinero en la bolsa y acostumbran a olvidarse de él durante varios años, prefieren invertir en acciones de las empresas del Ibex, ya que saben que aunque no van a tener el mejor comportamiento posible, si van las cosas mal no perderán demasiado dinero. Es decir, aunque existe un riesgo, éste no es preocupantemente grande.
       Los inversionistas a corto plazo, que hacen compras y ventas con mucha asiduidad y frecuencia, incluso algunos de ellos en la misma sesión adquieren acciones de una empresa y las revenden, que siguen muy de cerca la evolución de la bolsa con todo tipo de gráficos llenos de indicadores, suelen preferir los chicharros, ya que con ellos los beneficios que pueden obtener son mayores.

       Con las acciones del Ibex es díficil arruinarse, pero si se puede perder algo de dinero. Son las acciones más apropiadas para la gente que quiere dormir sin sobresaltos por las noches. No sirven para hacerse rico, pero si para preparar una buena jubilación.

       Con los chicharros si se puede ganar grandes sumas de dinero en poco tiempo si sabe elegir la inversión correcta, pero también se puede perder todo lo invertido en una empresa si se equivoca la elección. Por poner ejemplos cercanos en el tiempo, un valor considerado chicharro ha multiplicado por cinco su valor en menos de un mes, aunque también otro ha perdido todo su valor, al haber quebrado la empresa. Son las acciones ideales para los que tienen nervios de acero, para los que les gustan las emociones fuertes, y que consiguen dormir como lirones por las noches, aunque las acciones que hayan comprado hayan caido a la mitad del valor que tenían una semana antes.

       ¿Cuales son las que comprarías tú? Piensa un momento en el dinero que has ahorrado: sabes los sudores que te ha costado conseguirlo. ¿Te atreverías a comprar un chicharro? ¿No ves claro eso de perderlo todo si eliges mal y prefieres una empresa del Ibex para invertir en bolsa? ¿Nunca te han tentado los comentarios de un amigo que te ha dicho que si entrabas en las acciones de la empresa X doblabarías o triplicarías en un mes el dinero que invirtieses en ella?, ¿y si se equivocaba?

Jotape



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